Los hidratos de carbono son la principal fuente de energía para nuestro organismo, tanto a la hora de realizar un ejercicio físico como en nuestro día a día. Por ello, hay que darles un papel prioritario en nuestra dieta cuando sometemos a nuestro organismo a un nivel alto de esfuerzo o desgaste.
A la hora de realizar un ejercicio físico hay que distinguir entre hidratos de carbono simples e hidratos de carbono complejos.
Hidratos de carbono simples
Este tipo de hidratos de carbono nos pueden ayudar en un momento puntual de desgaste o fatiga extrema debido a que se absorben casi instantáneamente, y es por esto que nos dan la energía ¨de golpe¨. Se encuentran fundamentalmente en frutas, verduras o directamente en su forma más básica (sacarosa y glucosa) en geles y barritas. (Geles orales de Infisport)
Hidratos complejos
Nos van a ayudar a tener los niveles de energía elevados durante todo el transcurso de la actividad física, evitando bajones en el rendimiento y ayudándonos a conseguir de una manera más efectiva nuestras metas, ya que se van absorbiendo de manera más regular. Los encontraremos en cereales, legumbres, patatas… Pero si necesitamos un aporte extra podemos contar con la ayuda de suplementos como ND3, ND4 o ND4 Long Distance de Infisport.
Como conclusión, será recomendable tomar los complejos una o dos horas antes del comienzo de la actividad física, y en menor medida durante. Y los simples los tomaremos en mayor medida durante la actividad física para mantener la reserva de energía en el nivel más alto posible durante todo el ejercicio, así como después del mismo para ayudar a nuestro organismo a recuperarse de la mejor manera posible.