Aquí estamos de nuevo como cada semana. Queremos empezar realmente por el principio. La semana pasada nos adentramos en el mundo de la hidratación, ante la demanda de muchas de vosotras, pero realmente teníamos que a ver empezado por la doble limpieza facial.
¿En qué consiste una doble limpieza?
Muy sencillo. Esta rutina viene de la belleza coreana. Lo primero de todo es introducir en nuestro ritual otro limpiador con una base oleosa. Éste sirve para todo tipo de pieles, incluso las grasas, puede ser líquido o tipo bálsamo.
Con este paso retiraremos maquillaje, filtros solares, que no todos los limpiadores tienen la capacidad de retirarlos, polución, exceso de sebo…
Los aplicaremos con la piel seca, lo extendemos con las yemas de los dedos por todo el rostro con movimientos circulares, posteriormente emulsionamos con agua y lo aclaramos con abundante gua.
Generalmente este paso solo le vamos hacer por la noche
¡Ya tenemos nuestro primer paso en la rutina de limpiea!
El siguiente paso consiste en limpiar el rostro con limpiadores con base acuosa. Generalmente estos son los que todas solemos utiliza. Se trata de agua micelar, leches o espumas limpiadoras, según nuestro tipo de piel.
Esta rutina la haremos tanto por la mañana como por la noche
Y muchas os preguntareis ¿por qué hace falta limpiarse la cara por la mañana?
Mientras estamos durmiendo la piel sigue trabajando. Ésta pone en marcha los mecanismos de reparación celular. Resumiendo: se repara de todas las agresiones de nuestro día día. Así que un paso imprescindible por la mañana es limpiar nuestra piel antes de aplicar nuestro tratamiento habitual.
Ahora que ya hemos aplicado la doble limpieza, hay un tercer paso importante, tonificar, que muchas de nosotras no hacemos muy bien:
Es un paso imprescindible en toda buena limpieza. Para todo tipo de pieles.
Vamos a conseguir:
- Restablecer el PH de cada tipo de piel.
- Calmar las pieles sensibles.
- Cerrar poros en esas pieles normales a mixta.
- Equilibrar nuestra piel.
Por eso es muy importante usar un tónico específico para cada tipo de piel.
Ahora os vamos a presentar algún producto que puede ayudaros.
Paso 1-Doble Limpieza
Utilizaremos Caudalie Huile Desmaquillante.
Gran limpiador en aceite, enriquecido con aceite de ricino, ideal para nuestras pestañas, tiene un olor característico que le da el aceite de ricino.
¿Cómo le aplicaremos?
3 pulsaciones en el hueco de la mano, que posteriormente pondremos en nuestro rostro con un ligero masaje con movimientos circulares.
Emulsionamos con un poco de agua hasta que se convierta en color blanco y aclaramos con abundante agua.
Paso 2- Limpieza
Para escoger este producto es importante conocer nuestra piel y escoger la textura que más nos guste. Nos podemos encontrar con texturas en leche, geles o espumas, agua micelar…
Nosotros hoy hemos escogido la Espuma Limpiadora de Caudalie.
Limpiador muy suave y sin jabón, para todo tipo de pieles.
¿Cómo le aplicaremos?
Aplicaremos con la piel humedecida y extendemos con movimientos circulares por todo el rostro. Por último aclaramos con agua.
Vamos a por nuestro ultimo paso y no menos importante como ya hemos dicho.
Paso 3-Tónico
Para continuar con la misma marca hemos escogido la Loción Tónica Hidratante de Caudalie.
Con ella aportamos a todo el confort que nuestra piel se merece
Ahora sí, ya estamos preparadas para aplicar nuestro tratamiento.
Hoy ha coincidido que hemos escogido una rutina de limpieza de la misma marca pero esto a veces no tiene que ser así, ya que podemos mezclar marcas en beneficio de nuestra piel.
¡¡¡¡Y si tenéis alguna duda de producto o manera de aplicar, no dudéis en escribirnos!!!!
